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Alapar, Barcelona

Principios de junio, buena comida y Primavera Sound. ese era plan y para la parte gastronómica elegimos este restaurante.

Madera, cerámica y estética oriental. Barra cómoda.

Esta es una crónica de una propuesta que ya no existe, pues el mismo día de nuestra visita se modificó parte de la idea. Pero ahí va.

Jaume Marambio fue el chef de Pakta y se ha quedado con el local para tratar de marcar una impronta en su cocina. Técnicas japonesas, aliños peruanos y tradición de la zona en una carta apetecible. En lo enológico, interesantes opciones y precios elevados. Escogimos Penfolds Rawson's Retreat Semillon Chardonnay 2019 (sur de Australia), que nos gustó bastante.

Comimos:

-Sandía y dashi (buen comienzo, fruta osmotizada y un gran caldo)

-Nigiri de atún y ponzu (sobre medio panipuri, interesantísima combinación, delicioso)

-Nigiri de calamar, panceta ibérica y huevo (sobre pan tostado, sublime bocado, untuoso y muy sabroso)

-Caballa con salsa hoisin (con cebollas encurtidas y hojas de capuchina para hacer de "tortillas de taco", extremadamente placentero)

-Soba de anguila y tuétano (golosa preparación en la que la anguila hace de soba, sabores nítidos y potentes, un acierto)

-Fricandó de raya (base muy tradicional con una canela invasiva, quizá lo menos conseguido que probamos)
En este momento Jaume nos dio a probar un nigiri de caballa con teriyaki, todavía en revisión. Agradezco mucho el gesto.


-A la par de salmonete y foie en su «suquet» (descomunal plato, el suquet más rico que se pueda imaginar y un extraordinario salmonete en una armonía inigualable)

-Kakigori de fresas y praliné de sésamo negro (hecho en la Swan, curioso y más intenso de lo que parece)

-Mochi de chocolate a la brasa y helado de café (con un punto de sal que eleva el postre, muy bueno)

Buen café final.

El personal se mostró amable y diligente.

Pagamos unos 60 € por persona.

Jaume Marambio y Vicky Maccarone dan forma a su personalidad en un restaurante que, tras algún reajuste, parece sólido y convincente.

La conjunción de varias culinarias no es nueva, pero suele estar tan poco definida que estos platos se antojan un oasis en grandes desiertos.

Espero que funcione.









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