Una escapada a Girona en abril va a protagonizar las próximas entradas. Esta primera va a ser muy obvia, pero ahí va. La bikinería Rocambolesc es la última buena idea de Jordi Roca y el bikini clásico me encantó. En otro local y con un formato más ambicioso sería imbatible. En Plaça del Vi 7 probamos unos lingotes de patatas bravas magníficos, pero corroboré que el vino natural no es lo mío. Y también probamos de nuevo los helados de Rocambolesc . Magníficos. Qué ciudad tan bonita y con tantas opciones...
Pequeña escapada pirenaica en abril en la que optamos por este restaurante . Local algo extraño y decorado de manera impersonal. Mesas bien vestidas y copas correctas. Se ofrece un único menú (69 €) de cocina apegada al territorio pero con cierta dosis de viaje . En lo enológico, carta con poco interés. Bebimos Firé 2019 (I.G.P. Vinos de la Tierra Ribera del Gállego-Cinco Villas), potente y sabroso, y Poley Oloroso en Rama Solera 15 Años (D.O. Montilla-Moriles), aromático y equilibrado. Comimos: - Caldo especiado de gallinas ECO criadas en nuestro valle (riquísimo, con matices thai, de lo mejor del menú) -Croqueta de leche ahumada de oveja Vall de Cinca (anodina) -Pan chino con tartar (sin más) -Cocido (falto de sabor) -Ensalada de cabeza de jabalí (refrescante) -Salsa de tomate tostado (buena) -Conos de queso de Gabas (queso del otro lado de la frontera, agradable) -Sopa de coliflor y setas (sin gracia) -Arroz de alcachofas, latón de La Fueva y sardina de cubo (grano algo crudo, sa