Uno de mis sueños gastronómicos era el carro de quesos de Toni Gerez y había llegado la hora de cumplirlo en la visita a este restaurante.
El entorno es encantador y la sala es preciosa. Noble pero a la vez acogedora y ofreciendo una sensación de comodidad inigualable.
Mesas bien vestidas y copas magníficas.
Se ofrece carta y dos menús degustación. Escogimos el más largo de los dos, Ex Ex Experiencia Excepcional (165 €). En lo enológico, optamos por la armonía La selección Perelada (48 €), basada en vinos de la propiedad con alguna incorporación. Iré relatando lo probado junto a los platos.
Comienza la fiesta:
-Jugo de verduras (amargo, interesante)
-Aceites y sales (con un buen pan, gran selección)
Una copa de Perelada Stars Touch of Rosé Brut 2022 (D.O. Cava) es lo primero que llega a la mesa y, servido con generosidad, acompañará los aperitivos. Ligero y refrescante.
-Judía verde con tomate (fantástico)
-Tartaleta de verduras (con queso, crujiente y rica)-Acelgas fritas (impresionante técnica, me encantó)
-De recapte (versión de la coca clásica, con sardina y hortalizas escalivadas, valiente y lograda)
-Cim i tomba (espectacular evolución del guiso clásico, con el pescado crudo y un gran fondo)
-Vieiras en escabeche suave de agraz e hinojo (bien hecho)
-Setas cocinadas en la brasa (correcto)
-Pollo a l'ast y salsa limonea (gran preparación, mucho sabor)
-Mar y montaña, callos de calamar (calamar con salsa de callos de bacalao, descomunal)
El Obsequi de l'Empordà 2024 (D.O. Empordà) se quedó algo corto con ese gran plato, pero me pareció elegante.
-Pato de bellota madurado con peras (buenos matices, ave bien cocinada)
Finca la Garriga 2021 (D.O. Empordà), carnoso y balsámico, me gustó.
-Costilla de cerdo Duroc a baja temperatura y espardeñas a la brasa (una absoluta maravilla)
El Només Garnatxa Negra 2023 (D.O. Empordà) es intenso y sedoso.
-Canelón de liebre a la royal, trufa y foie (inconmensurable)
Finca Espolla 2020 (D.O. Empordà), redondo y expresivo, fue la parte líquida de esta fase y lo disfruté.
-Royal de etas, jugo de liebre y trufa (suculento)
-Carro de quesos de Toni Gerez (la excelencia hecha carro de quesos, la sabiduría y la profesionalidad de Toni Gerez convertidas en una recopilación apabullante, un momento que nunca olvidaré)
Se sirvió también el curioso dulce De Muller Vino de Misa (D.O. Terra Alta) para acompañar los azules.
-Naranja, perejil, oliva (para limpiar el paladar, tan sorprendente como satisfactorio)
-Calabaza, granola y crema madurada de la quesería La Xiquella (de temporada, amable)
El Bermejo Moscatel Naturalmente Dulce (D.O. Lanzarote), cálido y maduro, hizo buena pareja con él.
-Chocolates (exquisito)
El Pilliteri Cabernet Franc Icewine (Niagara on the Lake) me pareció una delicia.
-Vi to bar (bombones de lías de vino, asombrosos)
Buen café final.
El personal se mostró especialmente diligente y atento. Un ejemplo.
La experiencia iba dentro de un paquete, pero los precios son los indicados.
La cocina de Javi Martínez me ha dejado una grata impresión, y más teniendo en cuenta que mi principal reclamo eran los quesos.Vi mucho criterio, bastante técnica y presentaciones cuidadas. Todo en su sitio.
Potencia controlada en salsas y fondos, a la vez que maravillosos productos.
Y por supuesto ese carro de quesos que, por sí solo, es motivo para conocer esta casa y todas las posibilidades que ofrece.
Especialmente recomendable.
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