Asador Galino Pueyo, Tardienta (Huesca)

Surgió la posibilidad de visitar este asador situado en un pequeño pueblo de la provincia de Huesca. Veamos.

Espacio algo impersonal. Le iría bien una reforma.

Manteles y servilletas de tela. Copas mediocres.

Las opciones de vino y comida se presentan en pizarras. Se ofrece producto escogido con la brasa como idea principal.

Corta y conservadora carta de vinos. Me decanté por Bancales olvidados 2019 (D.O. Ribeira Sacra), que resultó intenso y aromático.

Comimos:


-Cecina Discarlux (buen producto pero estaba cortado demasiado grueso)


-Atún rojo (ventresca cruda y tartar con trufa, delicioso)

Se añadió un poco de un impresionante wagyu por deferencia de la casa.



-Ostra con caviar (levemente acariciada en la brasa, descomunal)


-Presa de buey (espectacular sabor, quizá algo fibrosa pero satisfactoria)


-Soufflé de queso (también a la brasa, muy rico)

Café mejorable para acabar.

El personal se mostró muy amable.

Pagamos unos 90 € por persona.

Me gustó el concepto y lo arriesgado de la propuesta. Falta vestirlo mejor, pero la idea está.

La revisión también podría llegar a alguno de los precios, pero los productos y los tratamientos están a un altísimo nivel.

Interesante.


Comentarios