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Mostrando entradas de agosto, 2022

La zorra, Sitges (Barcelona) (III)

Vuelta a un sitio que me encanta . Y casi nada ha cambiado. El menú vale ahora 32 € más los extras, pero es el mismo del verano pasado. Esta vez bebimos el superlativo Clos Lentiscus Malvasía de Sitges Blanc de blancs Brut Nature (D.O. Penedés) y el cumplidor Barco del Corneta Cucú 2021 (V.T Castilla- León). Comimos: -Rusa de trucha ahumada (untuosa, mejor que la recordaba) -Hummus de garbanzo con yogur de lima (ligero, rico) -Ostras (pequeñas pero sabrosas) -Mejillones thai (buen punto y correcto aliño, aunque les sigue faltando pegada) -Arroz de calamar, zamburiñas y salmorejo (potente y equilibrado, quizá algo menos de tostado en los bordes hubiera mejorado el conjunto) -Babá al ron con chantilly (sigue magnífico, un placer) Correcto café final. El personal, tan amable como siempre. Pagamos alrededor de 55 € por persona. Infalible, diferente y a pie de playa. Un fijo en la ciudad, indudablemente. Un sitió que llegó y sabe mantenerse, lo que quizá sea todavía más difícil. Alegría.

Unos aperitivos en Sitges (Barcelona)

 Viaje veraniego familiar a Sitges. Comienzo por los aperitivos. La primera parada fue en el Picnic que, aunque se ha renovado, conserva defectos del pasado. Correctos calamares a la andaluza y mejorables vieiras con confitura de cebolla y mantequilla de ajo asado. Cañas sin dedicación, servicio irregular y precios severos. En el Comptoir Français se estilan las ostras (en este caso de Arcachon) y los escargots a la Bourguignonne. Ambos deliciosos. Para beber,  Roger De Flor Brut Nature , un cava de precio muy bajo que cumple sin alardes. Amabilidad, comodidad y cuenta comedida. En Altamar la oferta de ostras es tentadora, así que optamos por las Utah Beach de Gillardeau  del nº 2 y, obviamente, son magníficas. Estupendos también los calamares a la andaluza con salsa tártara . Cañas adecuadas, esperas interminables y precios contenidos. Seguiremos con más opciones gastronómicas en Sitges.

Cruix, Barcelona

Aparece como uno de los menús con mejor relación calidad-precio de Barcelona, así que reservamos para despedir ese viaje a Barcelona. Local estrecho e incómodo. Pese a reservar en el interior se nos asignó sitio en la terraza, que es muy inhóspita. Mesas pequeñas y desnudas y servilletas de papel. El menú Classic Cruix (35 €) presenta una buena manera de conocer la cocina del establecimiento, local y con aires renovados . No tomamos vino. Comimos: -Nigiri de fuet (la base es pa amb tomàquet machacado, cuya textura me desagrada, not my cup of tea) - Gazpacho de espárragos, huevas de mújol y trucha (buena preparación, ligera y con matices interesantes) -Churros de pescado con espuma de alioli (ricos buñuelos de bacalao, un acierto) -Croquetas de pato Pekín (golosas y técnicamente impecables) Tras solicitar un cambio, gentilmente aceptado, se nos sirvió: -Calabacín al pesto y tomate seco (fresco, de temporada y humilde, correcto) -Arroz de lágrima ibérica y berenjena (grano en buen pun

Alapar, Barcelona

Principios de junio, buena comida y Primavera Sound. ese era plan y para la parte gastronómica elegimos este restaurante . Madera, cerámica y estética oriental. Barra cómoda. Esta es una crónica de una propuesta que ya no existe, pues el mismo día de nuestra visita se modificó parte de la idea. Pero ahí va. Jaume Marambio fue el chef de Pakta y se ha quedado con el local para tratar de marcar una impronta en su cocina. Técnicas japonesas, aliños peruanos y tradición de la zona en una carta apetecible . En lo enológico, interesantes opciones y precios elevados. Escogimos  Penfolds Rawson's Retreat Semillon Chardonnay 2019 (sur de Australia), que nos gustó bastante. Comimos: -Sandía y dashi (buen comienzo, fruta osmotizada y un gran caldo) -Nigiri de atún y ponzu (sobre medio panipuri, interesantísima combinación, delicioso) - Nigiri de calamar, panceta ibérica y huevo (sobre pan tostado, sublime bocado, untuoso y muy sabroso) - Caballa con salsa hoisin (con cebollas encurtidas y

Laventura Garnacha 2018

Rioja diferente: - Laventura Garnacha 2018 (D.O.Ca. Rioja), monovarietal de garnacha con crianza de un año en barricas grandes. Rubí de capa media. Ribete granate. En nariz es frutal y especiado . Frambuesas, fresas, canela y pan tostado. En boca es ligero y presenta gran equilibrio . Refrenda nariz. Buena acidez. Retrogusto largo. Costó unos 18 €. Ya conocido en este blog , este productor nunca defrauda. Potencia y elegancia unidas en un fantástico producto. Muy recomendable.

Dos aperitivos barceloneses

Viaje corto a Barcelona, pero buenas experiencias gastronómicas. Empezamos por los aperitivos. Mediamanga ofrece una barra muy noble. Probamos su estupenda pizza de sardina ahumada , la ostra con cóctel de hierbas y el mollete (no se parece nada a uno) de anguila y papada. Todo a buen nivel. En lo enológico, estupendas opciones por copas. Optamos por el  Tokaji Dry Furmint Disznókö 2021 (Tokaji, Hungría), fresco y seco, y Vinyes Domènech Bancal del Bosc Blanc 2021 (D.O. Montsant), floral y sedoso. Precios severos, pero gran sensación de comodidad. Pagamos unos 25 € por persona. En The fish and chips shop degustamos el plato que le da nombre y ciertamente está rico. Rebozado especiado y pescado jugoso. Para beber, cerveza no especialmente bien tirada. Pagamos unos 9 € por persona. Dos opciones variadas y ambas interesantes...

Restaurantes en La Habana (Cuba) (y III)

 Finalizamos con La Habana (por esta vez, claro). Grados es un restaurante diferente. Según me dicen, el único menú degustación sorpresa de la ciudad. Además la terraza es preciosa. Menú de 7-8 pases en el que el chef trata, con la materia prima de la que dispone, de mostrar su cocina y sus recuerdos. Enorme valentía. Destacaré el usuzukuri de róbalo , la pasta con cangrejos o el guiso de cordero. Hay más ganas que resultado, pero se observa criterio y honestidad. Llevamos nuestro propio vino. Pagamos unos 2500 pesos cubanos por persona. La noche continuó con cócteles en Yarini , cuya carta de comidas me pareció interesante. El restaurante que ocupa la casa donde se rodó "Fresa y chocolate" se llama La guarida , como la propia casa en la película, y supone un salto de calidad en un espacio maravilloso. El ceviche verde de emperador, el atún de aleta amarilla a la plancha y el pie de limón con almendras me parecieron muy agradables. Bebimos cerveza Bucanero, que solo pu